Él es arrogante, dominante y… para morirse.
Hunter es un asesino despiadado. Y el Departamento de Defensa lo tiene firmemente en sus manos, lo cual usualmente no es malo, ya que se encarga de matar a los chicos malos. La mayoría del tiempo disfruta de su trabajo. Eso es hasta que le encargan algo que nunca antes ha hecho: proteger a un humano de su mortal enemigo.

Hunter despierta el temperamento de Serena y su deseo a pesar de sus diferencias. Pronto, él está haciendo lo impensable –rompiendo las reglas en las cuales ha vivido, yendo en contra del gobierno para mantener a Serena a salvo. Pero, ¿Son los extraterrestres y el gobierno la mayor amenaza para la vida de Serena… o lo es Hunter?